Te quiero, también.
… Con la alegría de encontrar en ti lo que soy, he sido y quisiera ser.
Con el miedo de cuidar cada detalle y no dañarte.
Con la ilusión del dilema, de lo profético y de la lucidez.
Te quiero con más palabras que esas dos que solo en silencio frente a tus ojos puedo encontrar.
Te quiero, también.
Sin dudarlo, sin callarlo.
Con vergüenza por no poder mostrarlo más,
Con cuidado de encontrarlo dentro genuinamente.
… Con la alegría de encontrar en ti lo que soy, he sido y quisiera ser.
Con el miedo de cuidar cada detalle y no dañarte.
Con la ilusión del dilema, de lo profético y de la lucidez.
Te quiero con más palabras que esas dos que solo en silencio frente a tus ojos puedo encontrar.
Te quiero, también.
Sin dudarlo, sin callarlo.
Con vergüenza por no poder mostrarlo más,
Con cuidado de encontrarlo dentro genuinamente.
Te quiero, también.
Y no porque en ti esté todo: los hoyuelos, la pasión, la dulzura, la inocencia, el esfuerzo, la comprensión y el arte… y lo siguiente… Te quiero, también porque en ti estoy.